LA CAPITAL DEL FUTURO Y LAS MONTAÑAS ALTAI (De 7 a 9 Días)
Comenzamos el viaje por Astaná, hoy llamada Nur-Sultan, la actual capital de Kazajistán. Esta ciudad, embutida en un proyecto de urbe futurista de rascacielos bien merece una visita tanto de día como de noche, sobre todo la torre de Bayterek, símbolo de la ciudad y de todo Kazajistán. Otras visitas que bien merecen la pena son el Palacio de la Paz y la Reconciliación, diseñado por Norman Foster y construido como símbolo por los numerosos encuentros de diálogo entre religiones que se han dado en el país o la residencia oficial del Presidente de Kazajistán, convertida también en un popular reclamo turístico.
Pero Astaná no solo es hormigón y neones. También tiene visitas interesantes por los alrededores, como el espectacular lago Burabay, conocido por sus aguas cristalinas y su hermoso paisaje montañoso, donde si hay suerte y tenemos un día de sol, podremos ver el reflejo de los impresionantes picos de las montañas circundantes.
Abandonamos Astaná, en el norte del país, y viajamos en un largo tren hasta el este del país, hasta los montes Altai, concretamente hasta Ust'-Kamenogorsk (u Oskemen), donde apenas llegan los viajeros, para explorar rincones recónditos de la taiga de esta región, dominada bajo el imponente Beluja, de 4506 metros. Nos acercaremos a la población de Leningorsk para realizar alguna excursión por los espectaculares paisajes de la zona y descubrir esta frontera natural entre Kazajistán, Rusia, Mongolia y China